Mejores amigos parte 4 // Nada es para siempre.


Nada de lo escrito aquí es real, cualquier parecido con la vida es mera coincidencia y sacado de su imaginación no se la mía.
Ya tiene un tiempo que lo había escrito pero no pude subirlo hasta hoy.
Y bueno... Ya.

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Recuerdo que siempre soy yo el que toma las últimas decisiones. Decidí que no volvería a sentir nada por mi mejor amigo, pero nada me preparó para que fuera él el que se convirtiera en ese pilar que necesitaba.
Siempre fui yo el que se mantuvo a su lado, limpiando sus lágrimas por alguien más, pero es ahora él el que viene a mi lado, toma mis manos y me dice que todo estará bien.
Yo sé que todo será así, no es la primera vez que termino una relación, más si es la primera en la que casi uno mi alma a alguien más, estábamos a nada de casarnos; pero nunca se llegó a ello.
-Briel... Estas llorando.
-También soy humano, sabes.
-jajajajaja, a veces lo olvido, lo siento. -seguía a mi lado, mis manos entre las suyas y su cabeza en mi hombro. Esta vez fui yo quien le llamo y sin dudar llego a mi lado, sin decir nada, él era mi apoyo. -Pero... Por qué no lo solucionas?
-Sabes... Al principio pensé hacerlo, pero ella misma dijo que las cosas ya no iban bien y eso no es de ahora, es de hace meses.
-Briel... Si de verdad la amas, deberías...
-Liond... Si de verdad la amara, jamás hubiéramos pasado por esto.
-No es verdad, toda pareja pasa por algunos conflictos de vez en cuando.
-Liond... Basta. De verdad, no quiero convencerme... ¿De verdad creímos que alguien como yo podría tener un "felices para siempre"? 
-Te lo mereces.
-No estoy de acuerdo.

Antes de que pudiera replicar, me aleje simplemente para mirarlo de frente y me acerqué dándole un beso, ligero, apenas y un roce y sonreí. No supe si mi sonrisa fue de dolor, de pena, de alegría o simplemente de conformación. Solo sé que Liond no se quejó, no dijo nada, con aquel acto entendió que de todo lo que le había dicho era verdad, y nadie, incluso él, podían hacer algo para que yo cambiara de parecer.

No todas las personas estamos hechas para un final feliz, ni para una vida de pareja. Algunos como yo, simplemente necesitamos saber que estamos vivos, que podemos ver a las personas que apreciamos, siempre de lejos, y así todos estaremos bien.

Ahora, a ella le deberé toda mi vida, porque me apoyó en demasiadas cosas, y me soporto muchas más, fue un puerto seguro cuanto yo sólo quise tirarlo todo por la borda y al final, fue lo que hice.

Espero que no me recuerde con odio, me gustaría que siguiera su vida, así como yo seguiré con la vida... Y si aún así, no puede perdonarme, espero que me supere. 

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